EL BANCO DE LA NACIÓN AJENA

La agencia del Banco de la Nación de Paucara, parece que es de una nación muy ajena a la que creemos nuestra; más aún si eres mujer peruana, adulta mayor, quechua hablante y beneficiaria de Pensión 65; por eso son sujetas del mal trato que brinda un funcionario de este Banco, quien les grita a su antojo cuando ellas no logran resolver el problema de que sus huellas dactilares no son reconocidas, por ese aparatito que deben pulsar para recibir un derecho.

Ellas se han lavado mucho los dedos y secado con un trapito limpio, por alguna indicación previa o suposición de que el motivo de que sus huellas no son reconocidas es porque están sucios; el citado funcionario, al verlas esperando ser atendidas, les grita “que pasen esas gritonas, que se quejan como si yo tuviera la culpa”; “pon tu dedo ahí” le indica a la primera; la mujer nerviosa no encuentra un buen modo de colocar su dedo en ese aparatito extraño.

El funcionario le  grita, aún más irritado: “mira! aquí dice la huella no es compatible”, la mirada de la mujer no alcanza la pantalla de la computadora, lo más seguro es que si llegara a ver no leería lo que ahí dice; “porque no entiendes!?”, le pregunta el sujeto, “deben cuidar sus dedos” agrega, siempre con la voz en alto y en español.

La siguiente mujer tuvo el mismo resultado y el mismo mal trato; ambas se retiraron del banco quejándose en quechua de que “esto no les había ocurrido antes”, seguro se referían al asunto de sus huellas, porque el mal trato, de acuerdo a otros testimonios, es recurrente en esta agencia de Paucara.

Los gobiernos deben encontrar el modo de recordar diariamente y cada instante, de ser posible, a los servidores públicos y privados (de servicios públicos) que estamos en “El Año del Buen Servicio al Ciudadano”, y que, aunque no nos mencione a las ciudadanas, también nos incluye.

Atte. Una ciudadana, que confía en que eso del Buen Servicio al Ciudadano incluye a las ciudadanas.

(El tema de la identificación dactilar, para personas de la zona rural y/o que realizan trabajos que dañan sus huelas, merece una evaluación de su pertinencia)