Artículos pirotécnicos generan contaminación atmosférica y sonora

• Además de accidentes o quemaduras, producen más riesgos sobre la salud por la contaminación, advierte la Diresa Huancavelica.

Con el mensaje “Aire limpio y menos ruido”, el Programa de Vigilancia, del Aire, Ruido, Tabaco y Radiación Solar de la Dirección Regional de Salud (Diresa Huancavelica), exhorta a la población a no usar artículos pirotécnicos en estas fiestas de Navidad y Año Nuevo. “Los pirotécnicos no solo causan accidentes o quemaduras, sino también generan contaminación atmosférica y sonora y causan más riesgos sobre la salud”, señala el Ing. Tolomeo Guerra Quispe, coordinador del programa.

Los contaminantes del aire producen enfermedades, principalmente en el sistema respiratorio y cardiovascular. A corto plazo puede generar irritación de garganta, nariz, ojos, problemas para respirar, tos, malestar general, debilidad, náuseas y dolor de cabeza. A largo plazo enfermedades respiratorias crónicas, enfermedades crónicas cardiovasculares y muerte prematura. A través del Decreto Supremo N° 003-2017- Minam, con fecha del 7 de junio del 2017, se aprobaron los Estándares de Calidad Ambiental (ECA) para Aire.

La contaminación auditiva o sonora tiene efectos perjudiciales en el oído y efectos psicológicos como insomnio, fatiga, estrés, entre otros. La mejor forma de proteger los oídos es usar tapones u orejeras especiales, cuando el ruido supera los 85 dB (decibeles). El estallido de un pirotécnico de regular tamaño puede generar un ruido de 150 dB al oído humano, estruendo que se multiplica por tres en los oídos de las mascotas (principalmente gatos y perros). Cuando alguien se expone a un nivel excesivo, queda con un silbido en el oído, una explosión repentina puede perforar el tímpano.

Con Decreto Supremo N° 085-2003-PCM, se aprobó el Reglamento de Estándares Nacionales de Calidad Ambiental para Ruido. Las municipalidades provinciales en coordinación con las distritales deberán elaborar e implementar ordenanzas de prevención y control de la contaminación sonora, para no exceder los estándares nacionales de calidad ambiental de ruido.